Erick Lagos, gobernador por dos años
COLUMNA. Línea caliente POR. Edgar Hernández TEMA. Erick Lagos, gobernador por dos años
La adecuación al mandato constitucional que impone la Reforma Política recién aprobada, obligó en Veracruz a cambios, ajustes, nuevas estrategias y decisiones federal y estatal que favorecen a Erick Lagos Hernández y lo colocan en la antesala de la sucesión gubernamental.
Se confirma, una vez más, que la política es de circunstancias.
Erick Lagos, quien al igual que Duarte viene de la cultura del esfuerzo con una carrera política meteórica, por decisión cupular, es colocado en primer lugar de la línea de golpeo con un hándicap en su favor que si nadie lo detiene habrá de ser ungido como el candidato indiscutible del PRI al gobierno de Veracruz en 2016.
Lo será al homologarse constitucionalmente los periodos electorales, el estatal con el federal, que obliga a elegir por una sola ocasión a un gobernador por dos años y regresar a la elección de alcaldes por tres años.
Con el apuntalamiento de Erick se baja del caballo a Alberto Silva, quien venía en imparable carrera sucesoria al amparo de la dependencia más noble que tiene el gobierno, SEDESOL.
Se descarta, asimismo, la más mínima participación de cualquier otro miembro del gabinete como Adolfo Mota, quien ni siquiera irá a la diputación federal y se da un vuelco a la promoción de José Francisco Yunes Zorrilla atajándolo.
Este caballeroso senador nomás no creció.
Se le entregó todo el apoyo, el espacio, la posibilidad de diálogo con todos los actores, la tribuna –federal y estatal- y no levantó. Para una parte del círculo de poder es timorato. Le faltan arrestos.
No convence.
Le han puesto de pechito a las cabezas de grupos productivos, los políticos, los sociales, los universitarios, los más importantes empresarios, comerciantes e industriales…
Ha estrechado la mano de millares de ciudadanos de a pie y dispone de una prensa amable, dispuesta… pero no despunta. Veracruz lo sabe, México también lo sabe, pero sobre todo lo saben el presidente Enrique Peña Nieto y Luis Videgaray.
Jorge Carvallo también queda fuera del juego sucesorio. Irá por la diputación a fin de desterrarlo de Veracruz e impedir que su perversión y estrategia destructiva sigan minando. Se lo llevan para que no estorbe.
¿Por qué Erick Lagos?
El joven isleño, producto neto de la Fidelidad es un político que ha abrevado del poder establecido en los dos últimos mandatos. Es un hombre entregado al aparato. Sabe leer el libro de la política. También sabe de tiempos y de circunstancias. No se desboca. Se rodea de perversos, pero sabe esconder la mano.
No choca, pero si manda a chocar y como decía John F. Kennedy: “Perdona a tus enemigos, pero no olvides sus nombres”. Es en extremo trabajador y en todas sus chambas –diputado, dirigente del PRI, subsecretario y jefe del gabinete- ha salido con las más altas calificaciones.
Bien sabe, como decía Fernando Gutiérrez Barrios, que “todo lo que se puede pagar en política es barato” y tiene en la mano o más bien comen de su mano, los partidos Acción Nacional, el de la Revolución Democrática y los partidos morralla.
Los líderes de colonos y agrarios más revoltosos están de su lado y una parte de la clase política, la vieja guardia está a su lado orientándolo, marcándole tiempos y rumbos… A todos los actores los tiene cerca.
Pero además ningún trabajo le cuesta enseñar el músculo. Ya se vio una muestra en la glosa del III Informe del gobernador Duarte.
Pero Erick Lagos Hernández tiene un activo fundamental que no es precisamente el dirigente nacional del PRI, Cesar Camacho Quiroz, quien simpatiza abiertamente con él y de hecho fue quien dio el palomazo en favor de Elizabeth Morales gracias a la embajada de Erick.
Más no.
El bueno es Miguel Angel Osorio Chong, secretario de Gobernación federal, quien es su más fuerte pial.
Es su más importante aliado para la decisión 2016. Osorio Chong en el juego estratégico federal por el 2018 lanza la carta Erick en momentos en que el Secretario de Hacienda Luis Videgaray está dubitativo sobre jugar con Pepe Yunes.
Ya el mismo el hidalguense, tanto en corto como en público, ha manifestado simpatía política por el veracruzano con quien se mantiene en permanente contacto.
Hace seis años cuando la disputa por el poder estaba en pleno apogeo y que la lista de aspirantes se había disparado hasta 14 quedando finalmente en cinco, Adolfo Mota, Carolina Gudiño, David Velasco, Javier Duarte y Salvador Manzur, el gobernador Fidel Herrera Beltrán decidió mandar una señal contundente: nombrar a Duarte como orador principal en la ceremonia del 5 de febrero.
Hoy el gobernador Javier Duarte decide transitar por una estrategia parecida a la de Fidel enviando a tribuna al multicitado.
El pasado martes en el marco de la Conmemoración del 157 aniversario de la constitución de 1857 y el 97 aniversario de la constitución de 1917, Erick Lagos, dijo que “Veracruz respalda las reformas estructurales impulsadas por el presidente de la república, Enrique Peña Nieto”.
Veracruz apoya… pero ¿Cuál es la reforma estructural que compete al proceso sucesorio? ¡Adivinó!.. la Reforma Política.
En acto solemne en el patio central de palacio de gobierno y en representación del gobernador Javier Duarte de Ochoa, mencionó que en el estado “se gobierna conforme a la ley pero también con respeto al diálogo, en ese sentido señaló que en la entidad existe gobernabilidad, seguridad y paz social”. Pero además hizo hincapié en que el gobierno federal cuenta con Veracruz para impulsar el cambio que el país necesita.
A Erick, en el marco de las nuevas reformas ¿le conviene ser gobernador por dos años?
El centro decide, pero Duarte incide.
A la federación le interesa de sobremanera Veracruz como enclave del juego de poder del PRI para los siguientes 25 años. Le conviene que el primer priista veracruzano le garantice la victoria del 2016 para sentar las bases del 2018, en donde la decisión sexenal será exclusiva de Enrique Peña Nieto.
Y es que para el 2018 Duarte estará muy lejos de Veracruz.
Por ello en el juego de ajedrez político una eventual decisión podría girar en torno a la promoción de Erick para la gubernatura de dos años; la proyección federal de Alberto Silva, desconocido en México.
A él y otros más los llevarán de la mano a la diputación federal a fin de que se preparen para el 2018 en el marco de la eliminación de Pepe, el bloqueo a Héctor Yunes Landa al impedirle se apoye en el PAN-PRD bajo control de Erick, y cerrarle el paso a Miguel Angel Yunes Linares.
En el pizarrón la jugada se antoja impecable.
Sin embargo, quedan serias dudas por despejar. Por principio de cuentas habría que preguntarse hasta qué punto estará dispuesto Erick a cortarse el cordón umbilical que lo tiene amarrado a Fidel Herrera; qué hacer para evitar la embestida de su archienemigo Jorge Carvallo y la más importante cómo atomizar a Pepe y a Miguel Angel Yunes, el primero dispuesto a meterlo a la cárcel y el segundo cumplir su promesa de destruirlo en tres días con información que, según él, lo hará polvo.